Apenas concluyó el acto en la localidad de Yuto dónde se celebró el Día de La Lealtad, varios referentes del oficialismo se apartaron para realizar llamadas a operadores cercanos al massismo, ante los yerros de sus conductores.

Yuto fue el lugar dónde el Oficialismo disidió blanquear una salida a su difícil momento partidario. Los anuncios allí expuestos estremecieron a los escasos presentes, quienes no interpretaron como positivas las medidas que se tomarán tanto en el PJ y como en el gobierno de la provincia.

El llamado a un amnistía demuestra la debilidad actual, mas aún al ser realizada por el propio Guillermo Jenefes que el año pasado humilló hasta el desmayo a Miguel Morales; pero los rumores de un posible armado de una Línea Provincial de Concejales disidentes, impulsaron al oficialismo  a ofrecer concesiones para ampliar la base electoral, la cual se contrae día a día.

Más sorprendió el anuncio de una reforma política, apuntado a la Constitución Provincial y la Ley Electoral, con la creación de la figura del Vice Intendente, señal que una Ley de Lemas esta en las puertas, para acercar a los intendentes del FPV que por estas horas están en rebeldía, de esta manera podrían prescindir de las composiciones  de los órganos legislativos, los cuales se avizoran adversos en gran parte del territorio, pero ante definiciones ajustadas los reelectos intendentes del FPV tendrían la gobernabilidad local asegurada.

Pero lo aterrador del acto fue el fracaso de asistentes, las autoridades presentes no imaginan como Fellner le creyó a Rubén Valdivieso (Intendente de Yuto) que podría reunir 5.000 personas para esta fecha tan cara a los sentimientos del peronismo.

Ni siquiera los pocos comisionados e intendentes allí presentes pudieron llevar gente hasta la ciudad que guarda semejanzas en sus índices de desarrollo humano con localidades africanas o centro americanas, donde existen franjas de la población que todavía sobreviven de la recolección y la caza, dado la postergación en materia de inclusión laboral.

El anuncio de una reforma de la Constitución Provincial, declarada por el Gobernador sonó a la consolidación del pensamiento único e inconsulto;  el énfasis y la determinación estremecieron a propios y extraños, dando prueba de lo acorralado que se siente Eduardo Fellner ante un escenario desfavorable en el 2015.

Este anunció que fue previamente descripto por El Vice Gobernador Guillermo Jenefes, desvirtuó la mística del día del Día de la Lealtad, ya que la iniciativa develó el interés sectorial por sostener las prebendas de un grupo de poderosos,  que tienen una posición dominante ante un importante franja de descamisados jujeños.

El acto tuvo más ausencias que presencias, además de una total indiferencia del pueblo justicialista, el cual hace tiempo giró su espalda a los abusos de poder del PJ, que cerró las puertas al ejercicio de la democracia interna.

Seguramente el dictamen ratificado por Servini de Cubría que determina que el PJ en el territorio argentino ha caducado,  convierte al Gobernador de Jujuy en un Pte. “Trucho” del Consejo Nacional Justicialista. Esta decisión de la justicia podría tener una réplica en varias provincias, entre ellas Jujuy que incumple desde hace varios años la ley de los Partidos Políticos.

Sin el poder movilizante de Milagro Sala, Eduardo Fellner afrontará papelones cada vez que acepte concurrir a un acto político.