“Se terminó la luna de miel” Crisis 2019 por desfinanciamiento
El gobierno de Jujuy no podrá enfrentar sus todas las obligaciones corrientes durante el 2019; menos asumir los intereses de la deuda externa, la cual elevó su tasa por la inminente cesación de pago de la nación.
La promesa del tren Jujuy-La Quiaca, no solo era una utopía, fué una estafa electoral. La plataforma de reformas productivas para el desarrollo jujeño incursionando en nuevos experimentos alternativos (Jujuy verde, Jujuy energía viva, Jujuy recreativo) resultaron en “una acumulación monstruosa de deuda pública externa en dólares (U$s1.000 millones)”, la cual como una descomunal esponja absorberá los escasos activos de la provincia.
Jujuy recibió la última partida del Fondo Sojero para enfrentar el bono de fin de año y pequeñas recomposiciones, junto al anticipo del SAC; quedando literalmente sin recursos, a pesar que durante el 2018 recibió una transferencia importante desde nación, la que sin embargo no bastó para alcanzar el equilibrio fiscal.
Hoy, la mayoría de aquellos que aún se dicen radicales, no comulga con CAMBIEMOS en Jujuy, con gran decepción pero con sinceridad expresan su rechazo a las políticas instrumentadas desde el gobierno de la nación, cuyos correligionarios (diputados nacionales y senadores) votaron sin pudor, ni remordimientos.
Acompañar a MM significó elevar la pobreza en Jujuy a un 50% según estimaciones de consultora objetivas, que no tienen la necesidad de adquirir el comportamiento del INDEC de Moreno, oscura maniobra que hoy el gobierno de la provincia repite para ocultar la basura debajo de la alfombra.
“Se terminó la luna de miel”, el plan de contingencia resultó un programa clientelar destinado a repetir los vicios de la vieja política, lejos del anhelado desarrollo y el progreso que los jujeños en su gran mayoría votaron.
Por estos días GM ausente en gestiones útiles y de gran impacto social, no podría enmendar sus yerros con su presencia; ya que fracasó su propuesta idílica. Desde la casa de gobierno no ignoran el descalabro que generaron en Jujuy; donde el cotillón de microgestiones de relevancia municipal, no es suficiente para maquillar los porrazos que la provincia recibió; menos aún los que tendrá que enfrentar.
El presupuesto 2019 que aprobaron en la legislatura, es una falta grave a la democracia, pues ocultaron la deuda externa en dólares; que dejará a Jujuy en ruinas por décadas. Pero también omitieron describir los compromisos en pesos para este año, sin embargo reconocen un faltante de 5.000 millones, que dicen lo cubrirán con créditos externos.
Como hoy se sabe, MM liberó a las provincias para tomar crédito en el extranjero para financiar sus obras, pero el Riesgo País, hace imposible que suicidas internacionales ofrezcan recursos que nunca se devolverán, al menos que suceda como ocurrió en Grecia, en donde la provincia se desprenda de recursos energéticos y estratégicos, renunciando a gran parte de su soberanía.
Jujuy socia de CAMBIEMOS, saltó al abismo, arrastrando a 700.000 jujeños a la nada misma. En diciembre la inflación nuevamente experimentará un repunte, asolando en enero y febrero en cada hogar jujeño, se aproximan meses durísimos en los que se percibirá la ausencia del fondo sojero, la recomposición de todos los servicios públicos (aumento de tarifas del orden del 30%) y el transporte público, el cual además perderá los subsidios.
Ese es el escenario que nos espera en 2019, consecuencia de la toma irresponsable de fondos externos, de la fuga de capitales al extranjero –saqueo impune- que ningún funcionario de CAMBIEMOS denunció; pero por un par de huevazos realizaron un juicio escandaloso.
Terminó la luna de miel entre el pueblo de Jujuy y GM, ahora hay una inmensa mayoría busca otro camino; ¿la oposición, la ciudadanía, serán capaz de encontrarlo?
