“País sin alma: cuando la política ajusta a los viejos y sobrevive por inercia”

“País sin alma: cuando la política ajusta a los viejos y sobrevive por inercia”

Por Jorge A. Lindon // Mientras el Senado de la Nación convierte en ley un magro y tardío aumento a los jubilados, en medio de una sesión donde se respiraba tensión y derrota, lo que queda expuesto no es solo la debilidad política del presidente Javier Milei, sino una verdad más profunda y devastadora: Argentina ha perdido el alma.

En un país con más del 50% de niños pobres, jubilados que sobreviven con haberes que rozan lo criminal, y con millones de familias endeudadas, el debate político no gira en torno a cómo mejorar la vida de su gente, sino a cómo resistir la caída o conservar las cajas. Milei se empecina en sostener su plan con rigidez mesiánica, repitiendo como mantra el superávit fiscal, incluso cuando eso significa dejar a los adultos mayores hundidos en la miseria. Su lógica binaria –»ajuste o caos»– no admite grises, ni humanidad. Y cuando el Congreso se atreve a oponerle un límite, judicializa la política como si la división de poderes fuera un error del sistema.

Pero el otro lado del mostrador no es mejor. Los gobernadores, esos semifeudales que hace décadas controlan sus provincias con clientelismo, aprietan a Nación no por principios, sino por sus propias subsistencias. Se indignan por los recortes no porque falte comida en los comedores ni porque las escuelas se caigan a pedazos, sino porque peligra la supervivencia de sus redes de poder. Nadie discute el rumbo del país; todos maniobran para sobrevivir, como parásitos bien adaptados a un cuerpo social que se desangra.

Ajustar a los vulnerables: el punto más bajo de nuestra decadencia

La ley aprobada en el Senado no es una conquista jubilatoria, es apenas un alivio frente a una brutalidad insostenible. Nadie debería celebrar que haya sido necesaria semejante pulseada política para conceder lo que en cualquier país decente sería una obligación moral. Si somos capaces de ajustar a los que ya no pueden defenderse, ¿qué clase de sociedad hemos construido? ¿Qué modelo defendemos? ¿Qué futuro imaginamos?

  "Trump vs. Lula: Tensiones geopolíticas que amenazan el Corredor Bioceánico y el desarrollo del NOA argentino"

Lo más grave no es el ajuste, sino que lo hayamos normalizado. Que se instale la idea de que no hay recursos para los viejos, pero sí para sostener un modelo de gasto opaco, de privilegios legislativos, de privilegios empresariales, de intereses financieros. Milei no inaugura esta lógica; la perfecciona. Pero tampoco la destruye, solo la recicla desde un dogmatismo sin alma.

Una clase política sin creatividad ni coraje

El otro gran drama de la Argentina no es solo la falta de sensibilidad, sino la falta de ideas. Nadie se atreve a proponer una reforma previsional integral, progresiva y sostenible. Nadie plantea una reforma del Estado que recorte privilegios, no derechos. Nadie se anima a debatir de verdad cómo desarrollar el país con recursos productivos, regionales, con equidad.

El ajuste a los jubilados expone un sistema político incapaz de pensar soluciones estructurales. Ni Milei ni los gobernadores, ni oficialismo ni oposición, parecen estar a la altura. No discuten un nuevo contrato social, ni cómo modernizar el Estado, ni cómo proteger al que menos tiene sin empobrecer más a todos.

Un país empobrecido moralmente

La Argentina de hoy no solo sufre una crisis económica. Está atravesada por una crisis moral. La dirigencia, salvo contadas excepciones, ya no expresa grandeza ni visión. Gobernadores que se alinean según el viento, legisladores que votan por cálculo, y un presidente que cree que gobernar es resistir con insultos.

Los jubilados no votan con fuerza, no paran rutas, no incendian redes. Por eso, son carne de cañón para cualquier ajuste. Pero no se trata solo de ellos. Hoy son los jubilados, mañana serán los discapacitados, los estudiantes, los enfermos. En un país sin alma, todo es sacrificable.

  "Convivencia en Riesgo: Municipales de Tránsito exigen al Concejo Deliberante abrir el diálogo y denunciar el colapso de los servicios en San Salvador de Jujuy"

¿Desde que asumió Javier Milei, ¿tu situación económica personal?

Comentarios

Aún no hay comentarios. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *