La diputada jujeña Cynthia Alvarado ha dejado clara su postura tras el veto presidencial a la ley de financiamiento universitario: no se trata solo de defender la educación pública, sino de elevar su calidad y garantizar equidad en su acceso. En una encendido postura, Alvarado instó a que el debate no se enfoque exclusivamente en el financiamiento, sino que abarque la problemática estructural de la educación argentina.
“La calidad educativa ha sido lo más afectado en los últimos cuarenta años”, afirmó la legisladora del Partido Lyder, señalando que la base de una universidad sólida está en fortalecer los niveles primario y secundario. Su diagnóstico es contundente: la desproporción en la asignación de recursos ha beneficiado mayormente a las universidades, mientras que los estudiantes de sectores más vulnerables, especialmente en provincias del interior como Jujuy, enfrentan obstáculos de acceso mucho mayores.
Alvarado, quien se graduó de arquitecta en una universidad pública, no solo aboga por mantener la gratuidad de los estudios superiores, sino también por un acceso equitativo para los jóvenes del interior, quienes muchas veces encuentran que estudiar en grandes centros urbanos es una opción inalcanzable.
Con datos que respaldan su visión, la diputada resaltó que, mientras en otros países de la región como Brasil y Chile la tasa de graduación universitaria supera el 55%, en Argentina solo el 28% de los estudiantes logran completar sus estudios. “El ingreso irrestricto fue una solución, pero cuarenta años después ha dejado de serlo”, sentenció, proponiendo un debate profundo y serio sobre cómo mejorar el sistema educativo en todos sus niveles, y no solo en el ámbito universitario.
Finalmente, Alvarado hizo un llamado a la coherencia política: aquellos que hoy levantan la bandera de la educación pública, según ella, no se pronunciaron cuando en el pasado reciente el gobierno de Alberto Fernández, se recortaron recursos educativos. “Defender la educación pública no es solo un eslogan; es apostar por su calidad y su acceso equitativo”, concluyó la legisladora jujeña, dejando claro que el debate sobre la educación debe mirar más allá del financiamiento y plantear una verdadera transformación estructural.