Redacción Perico Noticias // En un mundo donde los acuerdos internacionales y los cambios geopolíticos reconfiguran las dinámicas regionales, La Quiaca, al norte de Argentina, emerge como un punto neurálgico para el desarrollo económico, cultural y estratégico. Bajo el liderazgo de su intendente, Dante Velázquez, esta ciudad fronteriza no solo se posiciona como el eje del corredor bioceánico que unirá el Atlántico con el Pacífico, sino que también se consolida como la única puerta argentina hacia el mundo BRICS, tras la reciente adhesión de Bolivia a este bloque económico.
Velázquez, un visionario en la interpretación de los desplazamientos de la geopolítica, ha colocado a La Quiaca en el centro de una nueva era de oportunidades que benefician a Jujuy, a la Argentina y a la región sudamericana. Su enfoque en proyectos transnacionales y su capacidad para conectar cultura, deporte e infraestructura han sentado las bases de un futuro prometedor.
El contexto internacional que impulsa a La Quiaca
- Bolivia en los BRICS: La adhesión boliviana al bloque BRICS, compuesto por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, convierte a Bolivia en un socio estratégico para el comercio global. La Quiaca, como frontera con Bolivia, se perfila como un nodo clave para el tránsito de bienes, servicios y oportunidades.
- El acuerdo Mercosur-Unión Europea: Este pacto amplía las posibilidades comerciales entre Sudamérica y Europa. La Quiaca podría ser una puerta de entrada estratégica para exportaciones desde Jujuy hacia mercados internacionales.
- Corredor bioceánico: La ubicación de La Quiaca en el corredor transversal que conecta el Pacífico con el Atlántico la transforma en un centro logístico esencial para el transporte y la transferencia de mercancías entre ambos océanos.
Dante Velázquez: Un pionero con visión geopolítica
Velázquez ha demostrado una comprensión única de cómo los movimientos geopolíticos pueden traducirse en desarrollo local. Sus proyectos y gestiones se enfocan en transformar La Quiaca en un nodo de intercambio cultural y económico. Entre sus iniciativas destacadas se encuentran:
- La declaración de la Manka Fiesta como Patrimonio Cultural de la Humanidad, un reconocimiento que posicionará a La Quiaca en el mapa cultural global.
- La gestión para convertir a La Quiaca en el centro de transferencia del corredor bioceánico, fortaleciendo su papel como eje de conectividad internacional.
- El impulso hacia la integración de deportes internacionales y servicios que promuevan el desarrollo social y económico.
5 ventajas estratégicas de La Quiaca bajo la visión de Velázquez
- Puerta al BRICS: Como única frontera argentina con un país BRICS, La Quiaca puede convertirse en un centro clave para acuerdos comerciales, industriales y tecnológicos con este bloque económico.
- Impulso a la economía regional: La proximidad a Bolivia permite generar un efecto derrame en Jujuy, potenciando el comercio, el turismo y la inversión en infraestructura.
- Fortalecimiento cultural y deportivo: Iniciativas como la Manka Fiesta y eventos deportivos internacionales refuerzan el tejido social y atraen atención global hacia la región.
- Zona franca y parque industrial: La consolidación de una zona franca y un parque industrial en La Quiaca puede catalizar la industrialización y la creación de empleo en el norte de Argentina.
- Autonomía para acuerdos transnacionales: Con la nueva ley de coparticipación en debate, La Quiaca podría gestionar acuerdos internacionales sin precedentes, consolidando su autonomía y liderazgo regional.
La Quiaca, el nuevo horizonte de la Argentina
Mientras otros actores políticos aún debaten las implicancias de los movimientos internacionales, Dante Velázquez ya ha trazado una ruta clara para La Quiaca: una ciudad que une culturas, conecta océanos y se integra en el tablero global. Su enfoque en la cultura, el deporte y la infraestructura no solo transforma a La Quiaca en un polo estratégico, sino que también inspira a otras regiones a ver más allá de las fronteras y aprovechar las oportunidades de un mundo en constante cambio.
Con Velázquez a la cabeza, La Quiaca no es solo la puerta norte de Argentina: es la entrada hacia un nuevo horizonte de desarrollo y cooperación internacional.
