Redacción Pêrico Noticias // En un contexto económico crítico, Pedro Pascuttini, presidente de la Cámara del Tabaco de Jujuy, ha asumido un rol protagónico en la defensa de los intereses de los productores tabacaleros. Frente a una oferta de precio por parte de la industria que considera inaceptable, Pascuttini ha manifestado su firme oposición, apelando a la unidad del sector y exigiendo al gobierno que tome una posición clara a favor de quienes sostienen la economía regional con empleo, tributos y estabilidad.
Una postura coherente y empática
Pascuttini no ha dudado en exponer con claridad los motivos de su rechazo a la propuesta industrial. «Pagar solamente el precio del año pasado sujeto a reajuste no sirve para los productores. Tenemos costos altísimos, sobre todo en energía y jornales», afirmó. Su diagnóstico refleja una realidad innegable: los costos de producción se han disparado, con incrementos de hasta el 387% en energía, un 600% en gas y un 139% en mano de obra, cifras que los productores deben asumir día a día sin un precio que refleje este esfuerzo.
Esta postura no solo evidencia un profundo entendimiento de la situación económica, sino que también se apoya en fundamentos sólidos y cifras concretas que demuestran la urgencia de una actualización de los precios. Pascuttini ha dejado claro que “los compradores también deben hacer su esfuerzo. De lo contrario, no llegamos a ninguna parte”.
Un llamado a la unidad del sector
El líder de la Cámara del Tabaco ha enfatizado la importancia de la cohesión entre los productores para enfrentar este desafío. «Nadie debe mirar a un costado», instó, subrayando que solo con una postura unificada será posible negociar condiciones justas. Pascuttini ha reiterado que el tabaco no solo es un producto, sino un pilar económico que genera empleo, tributos y contención social en la región.
Crítica a la miopía de la industria
Pascuttini también dirigió duras críticas hacia la industria tabacalera, señalando que su falta de flexibilidad demuestra una desconexión con la realidad económica que enfrentan los productores. «No podemos aceptar precios que ignoran los costos actuales de producción. Si la industria no comprende esto, estamos poniendo en riesgo la estabilidad de miles de familias», enfatizó.
El dirigente comparó la situación de Jujuy con otras provincias como Salta, donde, según señaló, los niveles de compra mantienen cierta regularidad. Esta disparidad subraya la necesidad de una intervención que garantice un trato equitativo para los productores jujeños.
La responsabilidad del gobierno
Pascuttini no dejó lugar para ambigüedades al exigir que el gobierno de Jujuy asuma un rol activo en la resolución de este conflicto. «No hay lugar para tibiezas, el gobierno debe estar a nuestro lado», declaró, subrayando la necesidad de que las autoridades participen en las negociaciones y respalden a quienes sostienen la economía de la región.
Según el titular de la Cámara, la reunión de la mesa técnica convocará a todas las partes, incluidos funcionarios gubernamentales, para garantizar que se logre un acuerdo justo. «Vamos a buscar que todas las partes estén sentadas y la reunión se haga lo más pronto posible», concluyó.
Un futuro incierto, pero con liderazgo firme
En momentos de incertidumbre, Pascuttini ha demostrado un liderazgo firme, empatizando con las necesidades de los productores y articulando una defensa coherente de sus derechos. Su llamado a la unión, su exigencia de responsabilidad por parte de la industria y su pedido de apoyo gubernamental representan una hoja de ruta para enfrentar esta crisis.
La lucha por un precio justo del tabaco no es solo una cuestión económica; es una batalla por la dignidad de quienes trabajan incansablemente para sostener la economía de la región. Bajo la conducción de Pedro Pascuttini, los productores tabacaleros tienen una voz fuerte y decidida que no descansará hasta alcanzar condiciones justas y sostenibles.