Perico Noticias // Hasta hace apenas unos días, la Libertad Avanza dominaba cómodamente el escenario político de Jujuy. Con dos senadores nacionales—Vilma Vedia y Ezequiel Atauche—y un diputado nacional Manuel Quintar, además del parlamentario del Mercosur Mario Nallar, que en una suerte de remate político otorgó lugares clave en la lista ganadora, el oficialismo nacional había logrado una de las victorias más contundentes en la historia reciente de la provincia. Pero lo que parecía una consolidación de su hegemonía ahora enfrenta un vendaval de incertidumbre.
La crisis desatada por el Criptogate, según la encuesta de DDD EXPRESS, alcanzó niveles de conocimiento sorprendentes: un 87,9% de los argentinos está al tanto del escándalo y un 66,7% lo considera la mayor crisis de Javier Milei desde su asunción. El escándalo golpeó con una violencia inusitada al relato libertario y lo expuso ante su electorado como una contradicción interna feroz: el partido que prometió terminar con la “casta” quedó asociado a una estafa de mercado. ¿Qué significa esto para la estructura libertaria en Jujuy, una provincia donde Milei arrasó pero cuya dirigencia local está fuertemente cuestionada?
Un electorado informado y crítico: ¿peligro de deserción libertaria?
La encuesta revela que 6 de cada 10 argentinos creen que hubo una estafa, y un 41,5% considera que el Poder Judicial debería investigarlo, con otro 33,3% pidiendo una acción desde el Congreso. Esto impacta de lleno en la imagen de los representantes libertarios jujeños. Mientras el gobierno nacional intentó minimizar el escándalo bajo la excusa de que “la gente no entiende sobre criptomonedas”, la realidad muestra lo contrario. Si el 83% de los argentinos cree que Milei debería actuar como presidente y no como influencer, ¿cómo repercute esto en la dirigencia local que dependió exclusivamente de la imagen del presidente para conquistar el electorado jujeño?
Ezequiel Atauche y Manuel Quintar, los principales referentes libertarios en la provincia, quedaron expuestos en una posición incómoda. Su construcción política nunca fue orgánica ni territorial: no tienen un aparato partidario sólido y su ascenso se basó en la marea violeta nacional. Sin un liderazgo fuerte en la provincia y sin figuras que generen identidad, el daño de la crisis se siente de manera más directa.
Jujuy es una provincia con tradición de liderazgos personalistas y estructuras políticas que funcionan como máquinas electorales activadas solo en tiempos de comicios. La LLA se insertó en esa lógica, pero sin la musculatura de los partidos tradicionales. El “voto anticasta” jujeño, que antes fluía hacia los libertarios, ahora se encuentra en un dilema. ¿A dónde migrará?
La crisis libertaria en Jujuy: ¿marea en retirada?
Los números nacionales revelan un problema que puede tener consecuencias profundas en la provincia: el 56,4% de los encuestados no cree en la excusa de que Milei “actuó como ciudadano” al promover la criptomoneda. En Jujuy, donde la precariedad del armado libertario ya generaba tensiones internas, la crisis expone una fractura aún mayor. El voto anti-nepotismo y anticorrupción, que antes era el capital político de la LLA, hoy podría volverse en su contra.
Otro dato inquietante: el 69,9% de los encuestados cree que hay que controlar más las decisiones del presidente. En Jujuy, esto se traduce en una mayor presión sobre los legisladores nacionales de LLA, que hasta ahora han navegado en las sombras del mileísmo sin rendir cuentas al electorado. ¿Podrán Atauche y Quintar sostener la defensa del gobierno en este contexto? La falta de una estructura política propia los deja expuestos a las corrientes de opinión pública que pueden definir su futuro.
El escenario electoral en Jujuy: incertidumbre total
La provincia, que hasta hace días parecía un bastión inexpugnable para el oficialismo nacional, ahora entra en un período de incertidumbre. El adelantamiento electoral en Jujuy aceleró el impacto del escándalo: Milei no solo enfrenta el rechazo de los indecisos, sino que su núcleo duro comienza a fragmentarse. El 29,4% de quienes lo votaron en el balotaje cree que hubo estafa, un número significativo si se considera la fidelidad de este electorado.
¿Será este el momento en que la volatilidad del mercado cripto se refleje en la volatilidad de la ola violeta? El Criptogate podría ser el primer gran test de resistencia para la LLA en Jujuy. Si los libertarios no logran recomponer la confianza de su electorado, la provincia podría ser testigo del inicio de la deserción libertaria y la dispersión del voto “anticasta” hacia otros espacios. La marea, que alguna vez avanzó con fuerza, hoy podría estar en pleno retroceso.