En tiempos en los que la desidia y la burocracia parecen ser moneda corriente en muchos municipios, la ciudad de Monterrico, bajo la conducción dinámica y apasionada de su intendente Luciano Moreira, demuestra que con esfuerzo y transparencia todo es posible. Una ciudad acostumbrada a la postergación hoy se transforma y avanza sin pausa, mostrando resultados concretos en la mejora de la calidad de vida de sus habitantes.
El último fin de semana fue un ejemplo categórico de esta dedicación incansable. Mientras muchos descansaban, los equipos de trabajo del municipio concluyeron el segundo tramo de iluminación LED sobre la estratégica ruta 43, uniendo el barrio Tupac de La Ovejería con el cruce Scaro. Este logro no es solo un símbolo de modernidad, sino también de seguridad para todos los vecinos que transitan diariamente por estas vías.

Luciano Moreira no gobierna desde la distancia ni desde un escritorio cómodo. Su liderazgo es participativo y cercano, y este estilo de gestión se refleja claramente en las acciones realizadas por su equipo. Trabajar «24/7» no es solo un eslogan, es una realidad palpable en Monterrico. Y lo más destacable: el propio pueblo tomó conciencia de que el progreso es responsabilidad compartida, que todos deben poner el hombro para lograr la ciudad que siempre soñaron.
Los vecinos entienden que esta cruzada no es solamente política, sino una auténtica gesta estratégica para el desarrollo integral de la ciudad. La transformación de Monterrico es hoy una realidad indiscutible, sustentada en el esfuerzo conjunto de funcionarios y ciudadanos comprometidos, trabajando codo a codo desde el lunes hasta el siguiente lunes, en un compromiso que supera cualquier expectativa.
La reacción en las redes sociales no se hizo esperar. Vecinos expresan alegría y orgullo, reconociendo públicamente las obras concretas que mejoran día a día su calidad de vida. Los mensajes de agradecimiento y felicitaciones son el testimonio real del apoyo social, un reconocimiento justo al esfuerzo constante de la gestión municipal, que no se detiene ni siquiera en días tradicionalmente reservados al descanso.
En Luciano Moreira, la ciudad de Monterrico encuentra un liderazgo capaz, transparente y decidido, con una capacidad excepcional para conectar con las necesidades cotidianas de los ciudadanos. No solo escucha demandas históricas, sino que responde con acciones concretas que cambian vidas. Esta capacidad de sintonizar con los vecinos, entender sus expectativas y cumplir promesas de gestión, consolida su figura como un referente político genuino en la provincia.
Este trabajo incansable continúa hoy mismo, lunes, con el inicio del tercer tramo del ambicioso proyecto de iluminación, que irá desde el barrio Tupac de La Ovejería hasta Los Lapachos. Monterrico está en marcha y no piensa detenerse. El cambio no es una promesa, es un hecho tangible gracias a un intendente que ha decidido hacer historia desde la cercanía, la transparencia y la acción constante.