Catamarca, Jujuy y La Rioja tienen los salarios privados más altos en el NEA-NOA
Según un informe de Economía y Regiones, en base a datos oficiales, la remuneración bruta promedio mensual del sector privado al cuarto trimestre de 2015 ascendió a $17.808, 29,2% por encima del registro del mismo trimestre de 2014.
Región Norte Grande ||Las remuneraciones más altas corresponden a la región Patagónica y la Ciudad de Buenos Aires, siendo Santa Cruz la provincia con mayor remuneración promedio ($33.454). Las provincias de Santiago del Estero y Misiones son las de menor remuneración ($11.982 y $12.630, respectivamente).
En 8 provincias los salarios crecieron por encima del promedio (29,2%). Neuquén fue la que mostró la menor variación (23,5%), mientras que Tierra del Fuego la mayor (32,6%).
El “sector productor de bienes” fue el de mayor remuneración bruta, con un promedio de $27.410, mientras las remuneraciones más bajas correspondieron a los sectores “productores de servicios”, con un promedio de $18.232 mensuales.
Dentro del sector productor de bienes, los salarios más altos corresponden a los empleados del sector de minas y canteras, y suministro de energía, que percibieron un salario promedio de $53.682 y $36.490 respectivamente. En tanto, los de la industria manufacturera tuvieron un ingreso mensual de $21.664, con un incremento salarial del 28,9% interanual, mientras que los de la construcción registraron ingresos promedios de $13.322.
En el sector servicios, los que se desempeñan en el sector de intermediación financiera percibieron las mayores remuneraciones mensuales ($30.842). Más lejos le sigue el sector Transporte, con remuneraciones promedio de $23.700 y Servicios Sociales y de Salud $18.097 mensuales.
Al cuarto trimestre de 2015, los puestos de trabajo privados declarados alcanzaron a 6.587.859, presentando un incremento del 2% respecto al mismo trimestre de 2014. Sin embargo, no se cuentan con datos desagregados por provincias ni sector de actividad.
Las remuneraciones más altas del sector privado corresponden a la Región Patagónica y la Ciudad de Buenos Aires, siendo Santa Cruz la provincia con mayor remuneración promedio ($33.454).
En tanto en el Norte Grande (NEA.NOA), Santiago del Estero y Misiones son las provincias de menor remuneración bruta ($11.982 y $12.630, respectivamente). Si se comparan estos niveles con los de la provincia de mayor salario promedio (Santa Cruz), se tiene que la remuneración promedio santacruceña es 2,79 veces superior a la de la provincia de menor salario.
El incremento interanual de los salarios privados también resultó heterogéneo a nivel provincial, al observarse 8 provincias donde los salarios crecieron por encima del promedio (29,2%). La Provincia de Neuquén fue la que mostró la menor variación (23,5%), mientras que Tierra del Fuego la mayor (32,6%).
A nivel regional, el mayor incremento nominal de las remuneraciones se observa en la región Pampeana (+29,8%), única región que creció por encima de la media nacional. En cambio, crecieron por debajo de la media nacional la región Centro (+29,1%), NOA (+29%), NEA (+28,3%), Patagónica (+27,6%) y Cuyo (+27,4%).
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Las diferencias provinciales, y regionales, en los incrementos salariales del sector privado registrado, están directamente relacionados con el entramado productivo, las negociaciones colectivas, el nivel general de precios y la situación del mercado laboral (oferta y demanda de mano de obra) en cada región geográfica. Es así como la región patagónica y la Ciudad de Buenos Aires presentan los mayores niveles salariales, dado que gran parte de su economía se encuentra ligada al sector hidrocarburífero y los servicios financieros, respectivamente.
Las características salariales del sector industrial y de las economías regionales, con una elevada competitividad internacional, explican los niveles de salario vigentes en las provincias intermedias.
Por último, las condiciones salariales del sector agropecuario y comercial establecen los niveles salariales del sector privado en las provincias del Norte del país. Además, las regiones con mayores niveles de pobreza, desempleo y empleo informal, tienden a generar un “achatamiento” en las remuneraciones medias, producto de la abundante mano de obra (no calificada) disponible.