Crudo diagnóstico de Macri sobre la herencia del kirchnerismo: «Va a llevar tiempo ordenarlo»
«Lo primero que tenemos que hacer es reconocer que no estamos bien, aunque nos duela, aunque cueste», fue una de las primeras frases del discurso de Macri, que finalmente optó por mencionar el lastre que le dejaron sus antecesores, pese a que muchos de sus asesores le recomendaban no meterse en el tema.
«Venimos de años en los que el Estado ha mentido sistemáticamente. Se ocultó información, faltan documentos, no hay estadísticas, cuesta encontrar un papel», indicó el presidente, que habló de un «Estado desordenado» pese a que desde «2006 al 2015, se pagaron casi 694 mil millones de dólares en impuestos más que en la década del 90».
Camuflaron el desempleo con empleo público, nos mintieron
«Pese a que hubo más recursos, no hubo mejoras en escuelas, en la seguridad; siguieron los problemas estructurales de pobreza lo que, sumado a la corrupción desidia e incompetencia, nos encontramos con un Estado con poca capacidad para resolver sus problemas», acusó Macri.
Celebró el inicio de clases y anunció que promoverá la escolaridad en los 3 años, como parte de una cuerdo nacional firmado por el ministro de Educación Esteban Bullrich. Fue el único miembro de su gabinete que nombró.
El presidente estaba decidido a dejar atrás aquellos años de discursos timoratos en la Legislatura porteña, donde llegó a inaugurar las sesiones en sólo 7 minutos.
Habló en un tono más alto que el habitual, que subió cuando los camporistas intentaron taparlo con insultos. Leyó, como hacen todos los jefes de Estado (Cristina Kirchner era una excepción), pero levantó la cabeza cada dos minutos y se animó a improvisar varia veces.
Cuando empezó a leer una hoja repetida y se lo advirtieron, tuvo reacción para reirese y bromear con los kirchnerista.
Dijo haber encontrado «un Estado plagado de clientelismo, de despilfarro y corrupción», e insistió en las supuestas falsedad de las estadísticas del gobierno anterior, esta vez en referencia al empleo. «Camuflaron el desempleo con empleo público, nos mintieron», disparó.
Criticó que el kirchnerismo dejó a 3.800.000 personas que trabajan en negro, en contraprestación con el aumento del «empleo público, sin mejorar el servicio que presta el Estado, porque la cantidad de empleados creció un 64 por ciento, de 2.200.000 a 3.600.000 de personas».
Macri también se refirió a las cifras de la pobreza, e intentó demoler el discurso del kirchnerismo al respecto. «Hay un 29% de pobreza; 6% de indigencia; 42% no tiene cloacas; 13% no tiene agua corriente; y 40% no tiene gas», planteó el mandatario, luego de hablar de una «inaceptable cantidad de compatriotas en la pobreza» frente a «un Estado enorme que no ha parado de crecer y no brinda prestaciones».
Desde la primera bandeja lo escuchaba Celso Pérez Esquivel, premio nobel de la paz, que tuvo un palco reservado junto al líder Qom Félix Díaz. Al lado, Gerónimo Venegas y Hugo Moyano representaban el ala sindical, entremedio del filósofo Alejandro Rozitchner.
La mayoría de los invitados eran funcionarios del Gobierno, como Paula Bertolt, Laura Alonso, Carlos Melconian (presidente del Banco Central) y Miguel de Godoy. No bajaron arengas de los palcos, pero sí siguieron a los dipuados con aplausos o el ya clásico cántico de Cambiemos «Si se puede».
Inflación, déficit y corrupción
Otro de los temas sobre los que hizo hincapié para detallar los problemas económicos fue la inflación, una cuestión que enfureció a los legisladores kirchneristas. «Hace una década que la Argentina es uno de los países con mayor inflación del mundo, con un promedio anual arriba del 20 por ciento y un 700 por ciento en los últimos 10 años», indicó.
«La causa principal fue la utilización del Banco Central para financiar el gasto público emitiendo pesos como usando reservas. Esto sometió a la población a una suba de precios constantes que daña sobre todo a los hogares que menos tienen», sostuvo el mandatario, que más adelante volvió sobre el tema y acusó a Cristina de «promoverla».
En la misma línea, Macri también se refirió al déficit y tiró una chicana al kirchnerismo duro al recordar las palabras de Néstor Kirchner en su primer discurso ante la asamblea legislativa. «Hace 13 años en este Congreso el presidente Néstor Kirchner habló de la importancia de los superávit gemelos, especialmente del superávit fiscal, eso después fue dejado de lado», afirmó, y luego agregó que Cristina dejó «uno de los mayores déficits de la historia», con un 7 por ciento del PBI.
Macri también también recalcó que encontró un «Estado con falta de transparencia, ineficiencia y en muchos casos de hechos de corrupción», por lo que pidió a la Justicia que investigue de forma «independiente», pero de manera «veloz». «La corrupción mata como las tragedias de Cromañon, la de Once y las rutas de la muerte», remarcó, al tiempo que insistió en que «no debe ni puede quedar impune». Como ejemplo puso el PAMI, donde dijo que hay «despilfarro y corrupción como en las peores épocas».
Podría seguir todo el día pero voy a cortar acá. Me comprometo a publicar todos los datos para que los argentinos sepan del estado en que estaba el país
Uno de los temas sobre los que más se explayó fue las deficiencias en las obras viales y de infraestructura. «Donde más decadencia hemos encontrado es en la infraestructura, se hicieron muchas licitaciones y se gastó mucho dinero. Pero los trenes, las rutas, los puertos y las comunicaciones están deteriorados o saturados», señaló.
Macri agregó que hay «más de mil obras viales paradas» y que terminarlas demandará «123.000 millones de pesos» en dos años, aunque en el Presupuesto aprobado el año anterior solo se contemple para ese rubro «22 mil millones de pesos» en 2016. Además, cuestionó que Cristina Kirchner «distribuyó las inversiones según la conveniencia política y no con un plan federal».
Tras un largo repaso de problemas que ocupó la primera mitad de su discurso, alrededor de media hora, Macri cortó las críticas porque «podría seguir todo el día». «Voy a cortar acá, pero me comprometo a publicar todos los datos, área por área, para que los argentinos sepan del estado en que estaba el país el 10 de diciembre», adelantó.