Demarco echó empleados porque realizó un análisis y determinó que “no necesitan”

Ciudad de Perico // El Jueves pasado, desde las 10.00 hs, el Intendente de la ciudad de Perico, el Lic. Luciano Demarco, realizó el discurso de apertura de las sesiones ordinarias para el período 2020. El discurso lo emitió en soledad, por disposiciones del protocolo sanitario aplicado a la cuarentena.

Si bién enumeró acciones, obras de remodelación y acondicionamiento institucional, omitió presentar la rendición de cuenta de sus cuatro meses de gestión, ratificando que su crítica permanente a “La vieja política” es solo un verso tribunero.

La documentación que respalda los movimientos de caja del Municipio debe ser girada al CD, con copia a los medios de comunicación para garantizar el eslogan “somos transparentes”, sin embargo la obligación ejecutiva aún no se concretó.

Demarco, dijo: “-no soy el Intendente buenito, seré el intendente justo”, pues no es justo criticar gestiones municipales y provinciales por omitir las rendiciones de cuentas, y cuando se tiene la oportunidad de ser ejemplar se incurre en el mismo hecho, Demarco le tomó el pelo a los ciudadanos.

En la semana que brindó el discurso Demarco despidió a varios agentes municipales, unos pertenecientes al CD, otros al municipio. Además bajó de categoría a personal de planta desconociendo las ordenanzas (Nº 1353 y Nº 1358) promulgadas que la crearon, hecho que la justicia ordenará rectificar a la brevedad, como también las autoridades del Ministerio de Trabajo.

Recordemos que la Ley Nacional N° 27.541 declaró la emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, administrativa, previsional, tarifaria, energética, sanitaria y social, mediante  el DNU 329 por el cual –prohibió los despidos-.

Sin embargo en Perico, el intendente desconoció la medida, dejando a más de una decena de familias en la calle y  a otros en la absoluta indigencia.

Luego del discurso Demarco ofreció una nota, dónde hizo referencia a los despidos, no aclaró si había o no recisión de contratos, en cambió se ocupó de afirmar que realizaron un análisis social de la situación económica de esos agentes públicos, determinando que no necesitan el empleo, por lo cual se procedió a darles de baja.

Recurrir a la situación económica personal, para despedir empleados públicos, es un acto discriminativo e ilegal, es un hecho persecutorio. Además se encargó de nombrar a un profesional que se desempeña como agente público y cumple funciones técnicas inherentes a su profesión ·……se encuentra bién económicamente….., no me interesa que UPCN lo defienda”.

Emitir opinión desde este medio para rebatir una argumentación a todas luces dolosa, sería un despropósito, debe ser la justicia quién restituya los derechos avasallados de los empleados despedidos, como el CD el órgano competente en subsanar todo acto que violenta las normas y la dignidad de las personas.

Durante el discurso de apertura Demarco llamó a castigar la hipocresía…no sin antes promoverse como “El Justo”.

La ilustración precedente nos permite observar como se bajó de categoría a un empleado municipal por la aplicación del Decreto Nº 045-G. El Agente Municipal afectado no percibía ni la mitad del importe de la canasta básica, sin embargo el hecho de violentar la calidad de Planta Permanente profundizó la indigencia y la estabilidad emocional, al dejarlo en absoluta precariedad laboral y sanitaria «Jornal de Segunda». Uno de tantos ejemplos.

Con respecto al Agente Público Técnico que en esta nota se hace referencia, sin dar precisión, anticipamos que el mismo según nuestras fuentes, se negó en dos oportunidades a sumarse al proyecto político «VIA», por lo cual el Intendente no logra superar el rechazo, procediendo a despedirlo, al no poder torcer la convicción ideológica del profesional.

¿Es Justo el Intendente?; pues el llamó a castigar la hipocresía.