El ajuste se impone a golpes: Bullrich y Milei desatan una represión feroz contra jubilados en Buenos Aires

Brutal represión a jubilados: el Frente por un Nuevo Jujuy denuncia el autoritarismo del gobierno y la violencia sistemática contra los más vulnerables

En un nuevo episodio de represión descontrolada, las fuerzas de seguridad nacionales y la policía porteña atacaron con brutalidad a una manifestación pacífica de jubilados en la Ciudad de Buenos Aires. Los hechos, que ocurrieron durante la tarde y la noche del 13 de marzo, dejaron un saldo alarmante de heridos, detenciones arbitrarias y escenas que remiten a los peores momentos de la historia argentina.

El Frente por un Nuevo Jujuy repudió enérgicamente la represión y denunció que el gobierno de Javier Milei ha convertido el derecho a manifestarse en un delito. «Las fuerzas de seguridad nacionales, a cargo de Patricia Bullrich, y las de la Ciudad actuaron fuera de la ley: una hora antes de que comience la manifestación ya estaban reprimiendo con ensañamiento, con el único fin de causar daño», expresaron en un comunicado.

Lo ocurrido en Buenos Aires, advierten, tiene la misma lógica de violencia que usó el gobierno de Gerardo Morales en 2023 para imponer la Reforma Constitucional en Jujuy. Detenciones sin identificación, vehículos civiles utilizados como patrulleros encubiertos, golpes a manifestantes al azar y una estrategia de represión preventiva que apunta a desmoralizar y aplacar la protesta social.

«La violencia no es solo la represión: es también el hambre y la miseria»

El Frente por un Nuevo Jujuy apuntó con dureza a la raíz del conflicto: los jubilados están en la calle porque el ajuste los condenó a la indigencia. «En el último año perdieron más de la mitad de su poder adquisitivo, les congelaron un bono que hoy debería ser de $140.000 y les quitaron los medicamentos del PAMI», denunciaron.

El gobierno libertario ha instalado un doble discurso donde se jacta de reducir el gasto público mientras ejecuta un ajuste que destruye la vida de los sectores más vulnerables. Según el comunicado, «la violencia no es solo la represión, sino también el hambre, la desprotección y el desprecio por los que menos tienen».

Una represión que deja víctimas: un fotógrafo herido de gravedad y una anciana brutalmente golpeada

Entre las víctimas del operativo represivo está Pablo Grillo, fotoperiodista que recibió el impacto de una granada de gas en la cabeza y hoy lucha por su vida. La represión también alcanzó a una anciana de 87 años, desmayada tras recibir un golpe brutal con un palo por parte de un agente policial.

Los niveles de ensañamiento recuerdan la represión contra los pueblos originarios y los manifestantes en Jujuy durante la resistencia contra la reforma de Morales. En ambos casos, la estrategia es la misma: eliminar el derecho a la protesta para blindar políticas de ajuste brutal.

«Milei debe revertir con fondos públicos su política de hambre»

El Frente por un Nuevo Jujuy exige una reparación urgente para los jubilados, que han sido las principales víctimas de las políticas de ajuste. «La represión no soluciona el hambre, Milei debe revertir con fondos públicos su política de miseria», sentenciaron.

Este es un punto clave: mientras el gobierno se ufana de eliminar el déficit fiscal, el costo real del ajuste lo están pagando los sectores más vulnerables, mientras los grandes grupos económicos siguen acumulando ganancias a costa del sufrimiento popular.

La represión no es un hecho aislado: es parte de un modelo que se sostiene con el miedo, con la violencia y con la criminalización de la protesta social. Pero la resistencia crece y, como advierten desde el Frente por un Nuevo Jujuy, los jubilados no se van a rendir. Seguirán en las calles porque no tienen otra opción. Y no estarán solos.

El país está en alerta: la represión es la herramienta de un gobierno sin respuestas. ¿Hasta cuándo lo vamos a permitir?