El espejismo inflacionario: ¿Conquista libertaria o estabilidad artificial?

Redacción Perico Noticias // Baja pero desesperante, es imprescindible cuestionar la cifra del 2,2% de inflación en enero, aclamada como el dato más bajo en cinco años. Aunque se presenta como una victoria de las políticas libertarias de Milei, hay varios indicios de que esta “mejora” podría ser más un artificio que una solución estructural:

• Manipulación de indicadores:
  En entornos de alta volatilidad, los índices de inflación pueden verse afectados por cambios en la metodología o intervenciones puntuales. La cifra del 2,2% podría estar sustentada en medidas temporales que ocultan presiones subyacentes, ya que, en muchos sectores, los precios siguen en tendencia alcista.
• Presión externa e interna:
  La inminente presión del FMI y las tensiones en el mercado internacional son factores que, a mediano plazo, podrían desestabilizar esta aparente desaceleración. La fuga de dólares —usada para “calmar” el mercado— es un claro síntoma de vulnerabilidad. Si bien puede ofrecer un respiro temporal, a la larga, la salida de capital tiende a traducirse en aumentos de precios.
• El dilema de las inversiones:
  En un escenario genuinamente sólido, las inversiones extranjeras fluirían hacia el país. Sin embargo, la dependencia de políticas artificialmente sostenidas y la incertidumbre sobre la durabilidad de estas medidas hacen dudar la confianza de los inversores. Si se desvela el artificio, es casi seguro que la entrada de capital se revierta, agravando la presión inflacionaria.

En conclusión, lo que se presenta como una conquista libertaria podría ser, en realidad, una estabilidad precaria y artificial. Sin fundamentos económicos robustos, el control inflacionario actual parece más un espejismo que, con la presión interna y externa, está condenado a desaparecer en un futuro no muy lejano.