Intensifican el cuidado fitosanitario de cítricos jujeños
El Ministerio de Producción profundizó las medidas de control para el resguardo de cultivos citrícolas en la región de Yuto, como parte del desarrollo de la Ley de Sanidad Vegetal.
Desde la Dirección Provincial de Sanidad y Calidad Agropecuaria, en conjunto con el INTA y el SENASA, se intensificaron las medidas de ayuda a productores para el manejo de las plagas en plantaciones de citrus, principalmente naranjas. Así lo afirmó el director dependiente de la cartera ministerial, Leandro Giupponi.
“Se está avanzando rápidamente en la fumigación de los lotes más afectados. Contamos con una pulverizadora con la que se va a fortalecer el barrido de la zona y acelerar las fumigaciones, y se presupone que con estas medidas vamos a liberarnos del ácaro que produce enfermedades virales”, destacó el funcionario.
Agregó que se llevan recorridas más de 120 hectáreas sobre un total de 170 incluidas en el plan de trabajo oficial, que beneficiará directamente a más de 60 familias productoras. En este sentido, Giupponi destacó la labor previa de monitoreo que se realizó junto al INTA y el SENASA, como también la efectividad de las aplicaciones que ya redujeron significativamente la presencia del ácaro invasor.
Entre otras acciones de orden fitosanitario, el director subrayó la realización de una jornada en la Estación Experimental de Cultivos Tropicales del INTA Yuto, donde la entidad a su cargo participó para mostrar los avances en técnicas de manejo del cultivo de tomate. “En esa ocasión informamos a los más de 50 productores presentes sobre los alcances de la Ley de Sanidad Vegetal respecto a la utilización de la receta agronómica para adquirir y aplicar productos, sobre las inscripciones y habilitaciones otorgadas en los Registros de Expendedores y Asesores Fitosanitarios”, dijo Giupponi.
Al respecto, consideró fundamental profundizar las acciones para sensibilizar a la comunidad en el uso responsable de productos fitosanitarios, empleando agroquímicos autorizados y en las dosis recomendadas. “Buscamos respetar los periodos de carencia para asegurar no sólo un adecuado control sanitario del cultivo, sino también la inocuidad y calidad de los frutos”, finalizó.
