Los radicales ignoran la fiscalización del conurbano porque no les dieron lugares

 Los radicales ignoran la fiscalización del conurbano porque no les dieron lugares
 LPO || El PRO no les dio lugares y están de brazos caídos. El miedo a que los echen de escuelas.
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En la UCR bonaerense no están preocupados por la fiscalización del conurbano. Como casi no le dieron lugares en las listas de concejales, los radicales de ese territorio bajaron los brazos para el 9 de agosto.

“No va a laburar nadie. Sólo tenemos un candidato a concejal en San Miguel a salir y en el resto vamos a ser testigos de lo que pase. Si nos hubieran abierto alguna lista al menos los ayudábamos con la logística”, confesó a LPO una de las autoridades del partido en la provincia.

En el interior sí hubo una apertura a radicales en algunos distritos y no se espera mayores problemas.

El problema es el conurbano, donde el radicalismo nunca volvió a hacer pie electoral tras la debacle política de 2001, pero cuando pudo mezclarse en un frente supo ganar algún concejal o legislador provincial.

Fue el caso de 2009, cuando Acuerdo Cívico y Social cosechó 20 puntos y hubo distritos que volvieron a tener concejales radicales luego de varios años. No es la apuesta para el 9 de agosto.

La fiscalización del conurbano, con casi 8 millones de votos, quedó a cargo del PRO y tiene dos vertientes: los punteros que pudo reclutar Emilio Monzó y los voluntarios, reclutados vía Facebook.

El ministro de Gobierno captó algunos peronistas dispersos en el sur del conurbano, como el candidato de Florencio Varela Dardo Otonello, pero su pelea con Jesús Cariglino le complicó el juego en el segundo cordón de la zona norte, donde el kirchnerismo le robó casi todos los intendentes al Frente Renovador.

El alcance de los voluntarios es un interrogante y los radicales no le tienen fe. “El problema  es que si los apuran se van. No lo podes evitar”, advierte un dirigente con experiencia en el conteo de votos.

En la UCR rememoran los triunfos de 1997 y 1999 en Buenos Aires, cuando Carlos Ruckauf ganó la Provincia pero Fernando de la Rúa fue el más votado en el conurbano. Aún quedan viejos dirigentes de esos años, capaces de aportar algo de logística, pero no están interesados en intervenir.

Esta mañana otra vez el tema fiscales encendió la alerta en el Frente Cambiemos. Sus apoderados advirtieron que un resquicio legal puede abrirle el camino al Gobierno para echar de las escuelas bonaerenses los fiscales opositores, en caso de no están empadronados en las mesas que quieran custodiar.

Para evitarlo, presentaron un recurso judicial exigiendo que se tome el país como distrito único y cualquier fiscal pueda cuidar el voto en cualquier mesa del país.

Macri quiere aprovechar la militancia de algunos de sus referentes porteños como Cristian Ritondo, a quien había puesto como compañero de fórmula de María Eugenia Vidal. Lo reemplazó por Daniel para contener a los radicales, pero no alcanzó para conformarlos.

En la UCR recordaban que esa restricción de desparramar fiscales a ciegas fue un reclamo de ellos hace décadas, para evitar que Eduardo Duhalde mandara militancia del conurbano a engrosar los padrones del interior. Ahora complica a Macri y no saben como ayudarlo.

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