Michetti: «Supongo que a Mauricio le gustaría Sanz de vice»

Por Diego Sehinkman | Para LA NACION
entrevista tuvo lugar en la casa de la senadora de Pro, en el barrio porteño de San Cristóbal.
-A diferencia de otros políticos, usted es especialmente sensible a lo que se diga de su persona. Cuando el año pasado Beatriz Sarlo escribió una nota crítica hacia usted, es sabido que la incomodó mucho. Ella habló de Pro como un partido vacío de ideología.
-Lo que me inquieta es que personas que son prestigiosas en el mundo de la cultura no puedan reconocer en Pro una construcción política. Cuando nosotros tuvimos el bicentenario de la ciudad, una de las cosas que yo hice fue entregar 200 medallas a personas destacadas. Y la que definió que había que entregarle una a Beatriz Sarlo fui yo. Que una persona que vos respetás y que valorás disminuya o hable de Pro como habla ella.
-Espere. No se lo digo para armar una polémica. Menciono a Sarlo como vocera de lo que cierto sector opina de Pro…
-Pero ¿acaso no ganamos dos elecciones y estamos creciendo de una manera impresionante? Nosotros tenemos una concepción clara de qué Estado queremos, de cuál es la idea de la autoridad, de poder, de qué significa la política en el siglo XXI y de cómo se hace una construcción con los ciudadanos y no la política, por un lado, y los ciudadanos, por el otro. No se puede decir que ahí no hay ideología.
-¿Qué debería ocurrir para que Gabriela Michetti no sea candidata a jefa de gobierno?
-[Largo silencio] A mí me haría pensar que no tengo que ser jefa de gobierno si realmente la construcción que tenemos que hacer a nivel nacional requiriera de mi presencia en la fórmula.
-O sea, si usted fuera decisiva para juntar votos…
-Si yo veo, si yo siento y si tengo las herramientas que me demuestran que para los argentinos es importante esa fórmula, yo voy a estar siempre dispuesta a contribuir. Es lo único. Pero necesito tener todas las herramientas sobre la mesa.
-¿Qué herramientas?
-Saber si vamos a hacer un acuerdo amplio, si vamos a hacer una cosa a nivel nacional que vaya más allá de un partido político…
-O sea, esa posibilidad está…
-Sí. Todas las posibilidades están. Lo que creo es que, tal vez, no del modo tradicional.
-Pero no juguemos a las escondidas. Todo el mundo sabe que usted quiere ser jefa de gobierno…
-Me parece que, después de diez años de estar trabajando en la política de la ciudad, es donde desemboca esto. Me gusta ese desafío, darle continuidad a lo que estamos haciendo. Igual lo voy a definir a fin de año.
-Suponga que se arma el siguiente acuerdo: Macri presidente; Ernesto Sanz, vice. Y usted, jefa de gobierno. ¿No sería una bendición del papa Francisco -que es su amigo- que se dé esa alternativa?
-[Risas] Podría ser, sí.
-¿O sea que le gustaría?
-Sí, eso me gustaría. Me parece que es una cosa valiosa. Hay un montón de argentinos a los que les gustaría.
-¿Y a Macri le gustaría Sanz de vice?
-[Piensa] Sí, también. Supongo que también. Él tiene valoración sobre Ernesto. Y es una persona que es amplia. Le gusta dar lugar a que las cosas vayan creciendo. A nosotros nos parece natural que dirigentes de distintos partidos, no necesariamente estructuras partidarias, pudieran definir que, si la gente los ve como sus representantes, se construyera junto a la gente una representación. Pero eso nos pasa a los de Pro.
-Una parte de UNEN, con «Pino» Solanas a la cabeza, ya rechazó cualquier acuerdo con Pro.
-Es que en las estructuras partidarias tradicionales, como el radicalismo, el peronismo, el socialismo, los partidos de izquierda, se sigue pensando en la lógica de una política separada de la ciudadanía.
-Ahí están sentados «Pino» y Binner. Convénzalos.
-No me voy a dedicar a convencerlos a ellos. Me parece que con Ernesto tenemos mucho más que ver, y con otros dirigentes del radicalismo.
-¿Con Aguad?
-Sí, Aguad ha tenido últimamente reuniones explícitas en Córdoba.
-¿Y con Lousteau?
-Yo tengo una relación personal excelente con Martín. Es otra de las personas que también hacen falta. ¿Desde qué lugar? No sé.
-¿Podría ser vice suyo en la ciudad?
-No voy a hablar de eso ahora.
-O sea que podríamos decir que dentro de UNEN hay gente «Pro-friendly»…
-Sí, totalmente. O por lo menos son más abiertos a pensar situaciones distintas de las que tradicionalmente viene pensando la política.
-¿Y qué harán los «Pro-friendly»? ¿Saltarán de UNEN?
-No tenemos idea si van a poder mantenerse todos los de UNEN, porque son muy distintos entre ellos.
-¿Y usted qué piensa?
-Hay mucha tensión. Es obvio.
-Mire esta foto [Massa]. ¿Cree que es fácil para la gente diferenciarlo de Macri?
-Votar a Massa es votar siempre lo mismo.
-Se dice que en viviendas, Pro subejecutó. Y mucho.
-Ayer estaban hablando el jefe de gabinete con dos ministros del área y dijeron que van a hacer una exposición para mostrar que no hay subejecución, sino una manera de imputar los recursos.
-Otro reclamo fuerte es la falta de vacantes, sobre todo, en jardines maternales.
-El único distrito del país que tiene garantizado el 100% de vacantes para los chiquitos de 4 años es la ciudad de Buenos Aires. Estamos en el 80% de las salas de 3 y queremos llegar al 100 en 2015.
-Por último, mire esta foto [Rodríguez Larreta]. Yo voy a pronunciar un párrafo y usted lo completa: «Larreta tiene gestión de gobierno, pero no tiene carisma. Michetti tiene carisma, pero no tiene los equipos y poca gestión. Son perfectamente complementarios. Juntos serían la fórmula del éxito. Pero.».
-[Risas] Pero. las cosas son más complejas. La gente no elige gestores, elige gobernantes.
-Se dice que usted no tiene territorialidad y él sí.
-El equipo de Pro es el equipo de Pro. No es de Larreta ni de Michetti. En todo caso, son equipos de Mauricio. No de Horacio.
-También se dice que a Macri lo que le da confianza de Larreta es que lo ve gestionar…
-¡Pero no es verdad! Si Mauricio hubiera sentido eso no hubiera sido él quien le pidió a Ritondo que sacara la ley de las PASO. Se hubiera quedado calladito la boca y con el dedo definía su candidato.
-Pero debe de estar al tanto de que eso se comenta…
-Absolutamente. Y por eso te repito: Mauricio no es un gestor, es un gobernante. Recorré la historia de la humanidad. Pensá el presidente, intendente o gobernador del lugar que quieras que haya sido exitoso, y preguntate si fue un gestor o si fue un gobernante.
-El gestor sería Horacio…
-[Sonríe] Ah, no sé. Eso lo tiene que definir la gente.
-Dejamos acá.