El Gobierno le advirtió que la AFA tiene un plazo de un año para ajustar su estatuto y permitir que los clubes que lo deseen puedan convertirse en SAD.
Un día después de que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) rechazara las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD), el Gobierno intensificó su presión sobre la entidad que regula el fútbol argentino.
En un comunicado contundente, el ministro de Desregulaciones, Federico Sturzenegger, advirtió que la AFA tiene un plazo de un año para ajustar su estatuto y permitir que los clubes que lo deseen puedan convertirse en SAD.
“La AFA tiene un año para adecuar sus estatutos porque hay una ley de deportes que fue la que cambió el DNU 70, que básicamente define quiénes son los participantes del sistema de deportes y las federaciones que participan en la ley del deporte tienen que cumplir con esta normativa”, enfatizó Sturzenegger. El ministro subrayó que la AFA está “obligada” a entender que la ley de deportes permite diferentes formas societarias y que los clubes tienen el derecho de optar por la forma que elijan, sin ser excluidos de las organizaciones.
Sturzenegger aclaró que la reglamentación de esta ley será emitida la próxima semana y que, a partir de ese momento, la AFA contará con un año para adecuarse a las nuevas normativas. Esta medida busca forzar a la máxima entidad del fútbol argentino a aceptar la posibilidad de que los clubes se organicen bajo la forma de SAD, algo que la AFA ha rechazado hasta ahora.
El Gobierno ha redoblado la presión sobre la AFA, que, tras una reunión de su Comité Ejecutivo, reafirmó su postura de que solo las asociaciones civiles sin fines de lucro podrán competir en sus torneos. El presidente de la AFA, Claudio Tapia, reiteró esta posición en un comunicado: “Nos reunimos con el Comité Ejecutivo de la AFA y de la Liga Profesional en Ezeiza para, entre otros temas, aclarar la inalterabilidad del Estatuto frente a las SAD”.
En el mismo comunicado, la AFA argumentó que la entidad no tiene la autoridad para impedir que un club opte por convertirse en SAD, pero se ampara en la Constitución Nacional para rechazar su inclusión como miembro de la AFA y su participación en sus torneos.
Según la AFA, las modificaciones propuestas por el Gobierno “no obligan ni inciden en forma alguna en el estatuto social de la AFA”, que exige que sus miembros sean “Asociaciones Civiles sin fines de lucro”, tal como decidieron libremente las entidades miembros de la Asociación.
Las declaraciones de Sturzenegger se alinean con los comentarios previos del presidente Javier Milei, quien en las últimas semanas ha criticado a la Asociación presidida por Chiqui Tapia. Antes de que el seleccionado argentino, dirigido por Lionel Scaloni, se consagrara nuevamente campeón de América, Milei había cuestionado irónicamente la postura de la AFA sobre las SAD en una publicación de X.
“Pregunta técnica”, comenzó Milei en tono sarcástico, “si AFA se opone a las Sociedades Anónimas Deportivas, ¿por qué motivo permite que el plantel titular provenga de estas sociedades? ¿Acaso será que los resultados son importantes y las SADs tienen a los mejores? No más socialismo pobrista en el fútbol”, apuntó el presidente.
Mientras el Gobierno busca modernizar el sistema permitiendo la entrada de formas societarias más flexibles, con la inclusión del capital privado, la AFA defiende su modelo tradicional y corrupto, argumentando falsamente que las SAD podrían «comprometer» los principios fundacionales del fútbol argentino.