El Gobierno Nacional presentó una serie de medidas que buscan equilibrar el acceso a servicios públicos esenciales, como educación y salud, para extranjeros no residentes en Argentina. A partir de ahora, las universidades públicas y hospitales del país implementarán un sistema de arancelamiento para quienes no sean residentes, mientras que los ciudadanos argentinos y residentes seguirán accediendo a estos servicios de manera gratuita.
Según el vocero presidencial Manuel Adorni, estas modificaciones forman parte de un plan integral para optimizar recursos y garantizar la sostenibilidad del sistema público. Además, se busca fomentar un esquema de reciprocidad con otros países que también aplican aranceles para extranjeros en sus servicios públicos.
Aunque las medidas generan debate, el objetivo declarado es proteger la gratuidad para quienes contribuyen regularmente al sistema, asegurando al mismo tiempo que los extranjeros puedan acceder a estos servicios de manera regulada y transparente.
Con esta nueva perspectiva, el Gobierno busca construir un modelo inclusivo y sostenible, alineado con las prácticas internacionales.