Redacción Perico Noticias // El Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) anunció una reforma clave en la normativa que regula la creación de cooperativas en Argentina. A partir de ahora, será necesario un mínimo de seis asociados para constituir cooperativas de trabajo y provisión de servicios, reemplazando la flexibilización de 2021 que permitía su formación con tan solo tres integrantes.
Un giro hacia la solidez cooperativa
La decisión del INAES responde a un análisis exhaustivo de los resultados de las fiscalizaciones realizadas durante el último año. Según el organismo, las cooperativas con menos de seis asociados han mostrado dificultades para cumplir con los principios cooperativos básicos, lo que ha derivado en una gestión débil y, en muchos casos, insostenible.
En palabras de un vocero del INAES: «La reforma busca reforzar la identidad y los valores del modelo cooperativo, promoviendo una mayor participación y compromiso entre los asociados para garantizar la sostenibilidad de estas entidades.»
Adaptaciones y excepciones
Las cooperativas ya constituidas bajo la normativa previa tendrán un plazo de un año para ajustarse al nuevo requisito de seis integrantes. Sin embargo, se prevén excepciones para sectores específicos como las actividades informáticas, culturales y de cuidado, siempre que puedan demostrar su viabilidad con un número menor de asociados. Estas solicitudes serán evaluadas caso por caso por el INAES.
El contexto detrás del cambio
Durante 2023, se registraron 2684 cooperativas con menos de seis asociados. Sin embargo, un bajo porcentaje de estas logró responder a los requerimientos de fiscalización. Este panorama encendió las alarmas en el INAES, que busca evitar que las cooperativas sean utilizadas como estructuras informales o no funcionales.
El objetivo final de esta medida es garantizar que las cooperativas no solo cumplan con los principios legales, sino que también se conviertan en herramientas efectivas de inclusión económica y social.
Impacto en el sector cooperativo
La nueva normativa representa un desafío para pequeñas comunidades rurales y grupos emergentes que encuentran en las cooperativas un modelo viable para organizarse. No obstante, el INAES confía en que este cambio favorecerá la creación de entidades más sólidas, capaces de enfrentar desafíos económicos y sociales de manera colectiva.
Mientras tanto, sectores como la tecnología y la cultura recibirán un trato diferenciado, reconociendo la dinámica particular de estos ámbitos. Este equilibrio entre rigidez normativa y flexibilidad sectorial podría ser clave para garantizar el éxito de la medida.
Con esta reforma, el INAES reafirma su compromiso de fortalecer el movimiento cooperativo argentino, fomentando estructuras más inclusivas y sostenibles, bajo el lema de que “unidos, somos más fuertes”.