La política jujeña se desmorona entre la apatía ciudadana y una casta reciclada que ya no representa a nadie. Con altos niveles de ausentismo y votos descartados, el sistema entra en crisis. ¿Qué queda cuando ni los elegidos tienen legitimidad? Un pueblo sin rumbo exige respuestas antes del colapso.
Argentina vota cada vez menos: con casi el 47% de ausentismo en CABA, el "partido del no voto" gana por goleada. Sin participación, sin representación y sin alma, ¿qué sistema queda en pie? La patria está ausente, la anomia crece, y el poder ya no está en las urnas.
Perico eligió concejales sin pueblo y con una elección inconstitucional: más de 17.000 no votaron y se eligieron solo 4 bancas cuando deben ser 6. Piso del 5%, democracia mutilada, nadie representa a nadie. Escándalo institucional.