Monotributistas al paredón: el FMI ordena, Milei acata y la clase media paga la cuenta

Monotributistas al paredón: el FMI ordena, Milei acata y la clase media paga la cuenta

Bajo presión del FMI, el Gobierno avanza sobre el monotributo y prepara una reforma que puede multiplicar los costos para más de cuatro millones de pequeños contribuyentes, en plena recesión y con el empleo en retroceso. Lo que Milei presentó como “liberalismo” se transforma en el mayor sablazo fiscal contra la clase media trabajadora y el espíritu emprendedor argentino.
Del “impuesto es robo” al sablazo del FMI: Milei condena a los monotributistas y entrega la llave de la economía a Washington

Del “impuesto es robo” al sablazo del FMI: Milei condena a los monotributistas y entrega la llave de la economía a Washington

Mientras la economía se hunde en la recesión, el gobierno de Milei avanza con un impuestazo sobre los monotributistas exigido por el FMI: la eliminación del régimen simplificado y el salto a un esquema mucho más caro y complejo convierte a millones de cuentapropistas en variable de ajuste, dinamita el espíritu emprendedor y confirma que la política económica se decide más en Washington que en el Congreso argentino.
“Monotributo bajo fuego: Milei dinamita a los cuentapropistas y deja a Jujuy al borde de la economía total en negro”

“Monotributo bajo fuego: Milei dinamita a los cuentapropistas y deja a Jujuy al borde de la economía total en negro”

En una provincia con salarios de miseria, consumo desplomado y un mercado privado raquítico, el gobierno nacional prepara un mazazo fiscal contra el eslabón más débil de la cadena: los monotributistas. Subir el costo del régimen simplificado y empujar a miles de jujeños a convertirse en autónomos es condenarlos a impuestos impagables, contadores obligatorios y una presión fiscal incompatible con la realidad local. ¿Qué dicen los diputados nacionales por Jujuy? ¿El gobernador va a acompañar en silencio un esquema que puede vaciar aún más el circuito formal y disparar la informalidad? Jujuy, una vez más, corre el riesgo de pagar la crisis con el bolsillo de los que menos tienen y más trabajan.