Perico Noticias // La crisis en la obra social OSPRERA, que lleva más de tres meses intervenida por el gobierno nacional, ha alcanzado un punto crítico. Lejos de mejorar su funcionamiento, la intervención ha generado un vaciamiento que pone en riesgo la salud de miles de trabajadores rurales, quienes no cuentan con las prestaciones médicas esenciales, mientras la recaudación de sus aportes sigue en pie como si nada ocurriera.
Desde la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) Jujuy, su secretario general Alfredo Yusgra no dudó en calificar la situación como una vergüenza inadmisible, denunciando la inoperancia de la intervención gubernamental, que no solo ha profundizado el deterioro del sistema de salud de los trabajadores del campo, sino que además ha facilitado la venta del patrimonio de la obra social.
La salud de los trabajadores rurales, en estado de abandono
Los trabajadores rurales se encuentran en plena cosecha de tabaco y en otras zonas productivas, pero la falta de cobertura médica ha dejado a miles de afiliados en estado de vulnerabilidad extrema. La situación es particularmente grave en Jujuy, donde OSPRERA no está cumpliendo con la entrega de medicamentos, incluyendo tratamientos para cáncer, diabetes y otras enfermedades crónicas, afectando a quienes dependen de estos insumos para sobrevivir.
Además, afiliados que solicitaron prótesis hace más de tres meses siguen sin recibir respuesta, lo que demuestra un colapso administrativo y un abandono total del compromiso con la salud de los trabajadores.
“La obra social sigue recaudando el dinero de los trabajadores, pero no presta los servicios por los que pagamos. Esto no es solo ineficiencia, es una estafa a miles de familias rurales que quedan desprotegidas mientras la intervención vacía OSPRERA”, expresó con indignación Yusgra.
Vaciamiento escandaloso: venden el patrimonio de los trabajadores
Lejos de centrarse en la solución de los problemas sanitarios, la intervención de OSPRERA ha acelerado la venta del patrimonio de la obra social en Jujuy.
Camionetas, un móvil odontológico y hasta un hospital ambulante fueron subastados, dejando a los trabajadores sin los recursos móviles necesarios para acceder a la atención de salud en las zonas rurales. Para Yusgra, este saqueo de bienes no tiene justificación alguna:
“Mientras los trabajadores no pueden recibir atención médica, esta intervención decide subastar los recursos de la obra social. No hay un plan de mejoras, no hay una reestructuración sanitaria, lo único que hay es desidia, negocios oscuros y el abandono total del sistema de salud rural”, sentenció.
UATRE inicia la batalla legal contra la intervención
Ante esta crisis sanitaria y administrativa sin precedentes, la UATRE ha decidido impugnar judicialmente la intervención de OSPRERA, con el objetivo de recuperar la obra social y devolverla al servicio de los trabajadores rurales.
El sindicato ha iniciado acciones legales y ha exigido que el gobierno responda por el daño causado a más de 700.000 trabajadores rurales en todo el país que han quedado sin cobertura médica efectiva.
“No vamos a permitir que sigan destruyendo OSPRERA. Vamos a pelear en todas las instancias para recuperar la gestión y devolverle a los trabajadores lo que les pertenece”, afirmó Yusgra.
Un gobierno ausente ante una crisis que golpea a los más vulnerables
El caso de OSPRERA es el reflejo de un gobierno que ha intervenido sin planificación, sin sensibilidad y sin respuestas concretas. Lejos de mejorar la situación de los trabajadores rurales, la intervención ha generado un deterioro sin precedentes, dejando a miles de familias en una situación de abandono sanitario alarmante.
Si el gobierno nacional no toma medidas urgentes, la crisis en OSPRERA se convertirá en un escándalo sanitario de proporciones incontrolables, con consecuencias devastadoras para el sector rural. La salud de los trabajadores del campo argentino no puede ser una variable de ajuste ni un botín de negocios oscuros. Es momento de que las autoridades actúen antes de que sea demasiado tarde.