Dos nuevos femicidios en Córdoba y Jujuy exponen las grietas en los sistemas preventivos de seguridad en género, dejando a la vista la falta de protección real para las víctimas. A pesar de que ambos agresores fueron detenidos tras intentar huir, el trágico desenlace revela la ineficacia de las medidas de prevención y control. Las muertes de estas mujeres, una en Juan García, Córdoba, y otra en Jujuy, no solo son crímenes atroces, sino la muestra de que el sistema sigue fallando en proteger vidas.
El sistema preventivo en Argentina ha demostrado ser insuficiente a pesar de los avances legislativos. Los protocolos de alerta temprana y las medidas de protección a mujeres en situaciones de riesgo no se implementan con la efectividad necesaria, dejando a las víctimas vulnerables a sus agresores. Es urgente un replanteo en las estrategias preventivas, mejorando la coordinación entre la justicia, las fuerzas de seguridad y las instituciones que se encargan de atender casos de violencia de género.
