Inflación semanal se ubicó en el 1,7% y marca desaceleración
Una deuda pendiente: proyecto de Nasif profesionalizó a los instrumentadores quirúrgicos

Este jueves, en lo que fue la 25ta sesión ordinaria, la Legislatura de la provincia aprobó por unanimidad el proyecto de ley, del diputado provincial peronista Marcelo Nasif, que regulará el ejercicio de la profesión de instrumentadores quirúrgicos en la provincia. Una vez aprobado el proyecto quedó consagrado como ley Nª 5971.
La ley de instrumentadores viene es a cubrir una necesidad de larga data dentro del ámbito de los trabajadores y profesionales de la salud y la sanidad.
Básicamente profesionaliza una actividad que hasta ahora no tenía un marco jurídico y que era realizada por personal, tal vez idóneo, pero en muchos casos sin la debida formación y certificación.
La ley define el ámbito profesional de la actividad; establece dos ámbitos jerárquicos delimitados por el título habilitante; enumera las responsabilidades, derechos y deberes; establece los requisitos para el ejercicio y las prohibiciones para los matriculados; establece una autoridad de aplicación y abre la posibilidad de colegiación por parte de quienes hasta ahora solo tenìan una asociación. Asimismo establece un régimen disciplinario que será ejercido por la autoridad de aplicación, que será en este caso el Ministerio de Salud de la Provincia.
Al respecto, el autor del proyecto, el diputado provincial peronista Marcelo Nasif explicó: “Tanto los médicos como los otros profesionales, anestesistas por ejemplo, tienen una ley marco que regula la actividad. Es decir, están reguladas, por una normativa legal, las obligaciones y los derechos que tienen dentro de lo que es el ejercicio profesional en el ámbito de la Salud”.
“Los instrumentadores quirúrgicos, son auxiliares de los médicos en los procedimientos quirúrgicos en quirófano y por lo tanto tienen responsabilidades específicas”, continuó.
El diputado resumió la labor que desempeña un instrumentador y su importancia, “El instrumentador es el responsable de la preparación de la mesa de instrumentos quirúrgicos y el que se los va proporcionando al cirujano ante cada requerimiento; el médico no tiene tiempo, en una operación, de estar mirando los instrumentos y por eso existe la figura del instrumentador. Es una responsabilidad muy grande”.
Sin embargo, estos profesionales de la Salud no tenían una ley marco que estableciese los requisitos para matricularse, “no tenían un colegio profesional que funcione como autoridad de aplicación –ahora lo van a tener- para que controle a la actividad en la provincia”, aseguró Nasif.
Debido a la gran responsabilidad que implica y también a que hay gente que se preparó y se especializó en esta actividad es que era necesaria la ley; además “antes de esta ley, muchas clínicas privadas, para reducir costos, empleaban enfermeros idóneos para la tarea, pero no certificados. Lo que hace esta ley, es enmarcar a toda esta gente, darles una seguridad jurídica con respecto a lo que es su trabajo y otorgarles derechos en el caso de que la responsabilidad que surja de una operación no les caiga a ellos como no profesionales. Esta ley los profesionaliza”
“Esta ley establece un doble beneficios. Quien desempeña esta función en el quirófano tiene necesariamente que ser un instrumentador certificado, con título. Es una garantía para el paciente. Por otro lado, para el instrumentador matriculado es una garantía de fuente de trabajo genuina, a los fines de que no sean desplazados por personas idóneas sin título”, sintetizó el diputado.
Luego de la aprobación de la ley, un nutrido grupo de instrumentadores, que se habían apersonado en la legislatura para acompañar a Nasif en la presentación del proyecto y asistir a la votación, festejaron con algarabía y lágrimas por lo que fue un anhelo de larga data,
“Este proyecto comenzó a elaborarse en Junio. Recibimos a la Asociación de Instrumentadores Quirúrgicos, escuchamos sus inquietudes y en base a ellas pudimos elaborar un proyecto de ley que hoy ya es una realidad. Ellos habían intentado lograr esto en años anteriores, desde el 2012. Desde ese año les pidieron a los diputados un a ley, pero nunca se terminaron de tratar en el recinto y no progresaron más allá de las comisiones”, relató Nasif.
“Los instrumentadores han pelado mucho por tener una ley que los profesionalice. Ha sido una alegría muy grande para esta gente Para ellos es como pasar de estar de negro a blanco, ahora van a tener responsabilidades delimitadas, ya no se va a poder requerir de ellos desempeñar otras tareas que no les corresponde, van a tener una fuente de trabajo genuina y no van a poder ser desplazados por gente que no está certificada, y van a poder discutir la remuneración, sus honorarios, como profesionales. La profesionalización los jerarquiza dentro de los prestadores de Salud”, finalizó.