En un giro que refleja la mejora en la percepción de los mercados sobre la economía argentina, el Riesgo País cayó por debajo de los 900 puntos, una cifra que no se había alcanzado desde 2019. Esta reducción, que lo ubica en 893 puntos en el premarket, sugiere un renovado interés en los bonos argentinos y una mayor confianza en la capacidad del país para cumplir con sus obligaciones de deuda en el corto plazo.
El comportamiento positivo en el mercado de bonos, con subas de hasta un 2% en algunos títulos soberanos, refuerza esta tendencia. Los inversores parecen optimistas respecto a las reservas de dólares y la gestión fiscal del país, claves para reducir el riesgo de incumplimiento de pagos. La caída en el Riesgo País marca un momento de alivio en la economía argentina, sugiriendo una posible estabilización que podría atraer más capital extranjero en busca de retornos atractivos.
Este avance, aunque positivo, plantea el desafío de mantener la tendencia en un contexto global incierto.
