La Rosada empuja la ley del arrepetido empresario y un acuerdo civil para que hable Odebrecht

El Gobierno evalúa acelerar una ley que habilita a un sistema de arrepentido para empresarios pero no hay garantías que pueda utilizarlo para el caso Oberdercht, cuyos representantes legales negocian con Germán Garavano una reducción de la pena por los 35 millones de dólares de coimas que confesaron haber pagado en el país.

Pero como explicó LPO no hay un marco legal que le permita avanzar y por eso los juristas de Cambiemos estudian artilugios legales conseguir una confesión de los brasileños que sirva como puntapié inicial de la campaña electoral.

Una alternativa es el proyecto para establecer un régimen penal para personas jurídicas por delitos contra la administración pública y cohecho transnacional. Mauricio Macri lo envió en octubre a Diputados, pidió acelerarla en la apertura de sesiones y en marzo fue tratado en comisión, con la consigna de sumar seguridad jurídica para inversores, por las exigencias de la Ocde, el Gafi y el G20.

Pero el debate quedó en la nada, con varias reuniones de asesores sin resultado y en varias de ellas sin la presencia de representantes de la oficina anticorrupción, aun cuando Laura Alonso fue la promotora de la ley.

Las demoras habrían tenido relación con Oberdercht: como se trata de una ley penal, para los juristas de Cambiemos en el Congreso no podría aplicarse a esa investigación, como pretenderían en la Casa Rosada.

Por eso, una alternativa que estudian por estas horas es alguna vía civil que permita aplicarse con retroactividad y permitirle a un empresario brasileño confesar a quien le pagó las coimas. Para acelerar el trámite, sería por decreto de necesidad y urgencia.

Fue lo que pidió Marcos Peña en su reciente visita a la Cámara de Diputados y el martes los diputados de Cambiemos que integran la Comisión lo discutirían en una reunión cerrada. Tienen tiempo: Emilio Monzó no planea llamar a sesión hasta después del cierre de listas, porque no puede garantizar quórum.

El proyecto plantea multas o pérdidas de personerías para empresas que cometan delito y establece un régimen de «colaboración eficaz», para reducir penas, para negociar entre el Ministerio Público fiscal y los abogados de la compañía.

Macri no puede esperar: desde hoy, Alejandra Gils Carbó tiene en poder la información que la constructora brasileña aportó a la justicia brasileña en la causa de Lava Jato y sus intentos por desplazarlo siguen sin dar resultado.

Este jueves volvió a cuestionarla y el Congreso recibió a los fiscales que hace años piden en vano cambiar a la procuradora. Pero por ahora, sigue firme.

Desesperado, Garavano viajó a Estados Unidos a reunirse con colegas de Departamento de Justicia para obtener detalle de las coimas que los brasileños confesaron ante la Securities and Exchange Commission (SEC). No tiene tiempo que perder.

«Garavano negocia impunidad»

Atento a los movimientos, el bloque de diputados nacionales FPV-PJ, que preside Héctor Recalde, solicitó a través de dos proyectos de resolución la presencia de  Garavano para explicar qué está negociando con Odebrecht.

Los firmaron los diputados  Recalde, Diana Conti, Carlos Kunkel, Rodolfo Tailhade, Teresa García, Eduardo De Pedro, Marcos Cleri y Luis Cigogna, todos cercanos a Cristina Kirchner.

Y acusaron al ministro de estar «negociando la impunidad para el Grupo de Macri», y recordaron el caso del banco offshore controlado por Odebrecht que compró un crédito por 400 millones de dólares en el concurso de una empresa insolvente como Correo Argentino SA, propiedad de la familia del presidente.

La rionegrina María Emilia Soria presentó un pedido de interpelación a Garavano.  «Resulta importante a los fines de resguardar la autonomía de los poderes del Estado que predica nuestra Constitución Nacional, indagar sobre la intencionalidad y la expectativa del ministro Garavano sobre el resultado de la mencionada reunión. Esto es así dado que legalmente nada tendría el que ofrecer en una hipotética negociación, por lo que resta pensar que el contenido de dicho acuerdo resulta espurio», señaló.