Desde la Franja Morada, conducción de la mayoría de los Centros de Estudiantes de Derecho de las Universidades Públicas de nuestro país y con representación en la totalidad de dichas Facultades, nos manifestamos en relación al Proyecto de Reforma y Unificación de los Códigos Civil y Comercial de la Nación que tiene media sanción en la Cámara de Senadores del Congreso Nacional desde noviembre del año pasado y que hoy está siendo tratado de manera “express” por la Cámara de Diputados.

Después de meses sin discusión, el kirchnerismo y sus aliados sacó nuevamente a la luz este Proyecto con el objetivo de aprobarlo sin escuchar los aportes, críticas y modificaciones propuestos por numerosos juristas, docentes, jueces, abogados, estudiantes y miembros de las otras bancadas dentro del Congreso. Sinceramente, estamos siendo parte de un proceso en el cual solamente se quiere imponer una gran reforma normativa sin tener los consensos necesarios y recomendables para semejante modificación de los Códigos que nada más y nada menos regulan casi todos los ámbitos de los ciudadanos desde antes de nacer hasta después de morir.

Pero para entender más de que estamos hablando, nos parece importante describir como se dio este proceso: esta Reforma comenzó con buenos aires cuando la Presidente Cristina Fernández de Kirchner convocó a una Comisión de destacados juristas, presidida por el Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, e integrada por la Ministra de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Elena Highton de Nolasco, y la reconocida Jurista mendocina, Aída Kemelmajer de Carlucci. A su vez, éstos convocaron a más de cien reconocidos Juristas de todo el país conformando un grupo de trabajo prestigioso, plural y federal.

Dicha Comisión elaboró el Ante-proyecto de Reforma y Unificación de los Códigos Civil y Comercial de la Nación y se lo presentó a la Presidente nuevamente. Aquí es donde empezaron los problemas, ya que el Poder Ejecutivo nacional realizó un gran número de modificaciones de manera unilateral e inconsulta en el texto original y lo mismo sucedió en el Congreso con el Bloque del Frente para la Victoria. Esto provocó que la impronta original del Ante-proyecto se desvirtuara y desnaturalizara, quedando modificado negativamente y con deudas pendientes en gran parte del articulado donde se provocaba un gran adelanto legislativo.

Ante esto, la Franja Morada, como conducción de la mayoría de los Centros de Estudiantes de Derecho de las Universidades Públicas de nuestro país y con representación en la totalidad de dichas Facultades, nos manifestamos a favor de reformar y actualizar la legislación de fondo en materia comercial y civil, y compartimos y reivindicamos el trabajo elaborado por los Juristas de todo el país en el Ante-proyecto original, pero manifestamos nuestro profundo desacuerdo con todas las modificaciones incorporadas por el Poder Ejecutivo y el Bloque de Legisladores Nacionales del Frente para la Victoria por las siguientes razones:

• ·         Eliminación de la Responsabilidad del Estado y de los Funcionarios Públicos;
• ·         Eliminación de los Daños Punitivos;
• ·         Eliminación de las Acciones de clase;
• ·         Prohibición de aplicar Astreintes en el caso de que el Estado incumpla una sentencia judicial;
• ·         Eliminación del artículo que aseguraba el acceso al Agua Potable como un Derecho Humano;
• ·         Eliminación del capítulo que se refería a la realidad de los Pueblos Originarios;
• ·         Eliminación de los avances y modernización del régimen de Derecho de Familia.

Entendemos que todas estas modificaciones implican un grave retroceso en el Código proyectado y en nuestra legislación vigente, provocando no sólo un cercenamiento a nuestros Derechos, sino también una peligrosa afectación a la vida cotidiana de todos los ciudadanos de nuestro país. Además, consideramos que las modificaciones o supresiones realizadas por el Ejecutivo y el Bloque del F.P.V. en el Congreso, resultan una total falta de respeto para el centenar de juristas que dedicaron tiempo y esfuerzo a elaborar un Ante-proyecto moderno y que expresaba la impronta de la sociedad actual. Su trabajo fue desechado por el capricho del partido gobernante, que prefirió acomodar el Ante-proyecto a sus mezquinas necesidades, antes que a las de la sociedad en su conjunto.

Como estudiantes de Derecho nos sentimos en el compromiso de manifestar nuestra opinión al respecto ya que es una cuestión que nos afecta como ciudadanos en general y como futuros Abogados en particular.

“Aquellas personas que no están dispuestas a permanentes reformas, no estarán nunca en las filas de los hombres que apuestan a cambios trascendentales.”

Se aprobó el nuevo Código Civil y Comercial