Con menos fuerza, Brasil marchó contra Rousseff

 Con menos fuerza, Brasil marchó contra Rousseff

Miles de brasileños salieron a las calles para pedir el impeachment de Dilma. Las manifestaciones contaron con menos participación que las protestas de abril y agosto. 

TN.com.ar || Miles de brasileños salieron a las calles por cuarta vez en lo que va de año para exigir la destitución de la presidenta Dilma Rousseff, pero sin conseguir un apoyo masivo como las últimas veces.

Las protestas contra la mandataria izquierdista, blanco de un procedimiento de impeachment en el Congreso por maquillar las cuentas públicas, reunieron en 87 ciudades a unas 83.000 personas, según datos de la policía.

Fuera, Dilma!», «¡Fuera Partido de los Trabajadores!», «¡Nuestra bandera jamás será roja!» eran algunos de los cánticos que coreaban los manifestantes, que en su mayoría lucían los colores nacionales verde y amarillo. Por todos lados se veían máscaras satíricas de Rousseff y muñecos inflables con su imagen y la de su antecesor, Luiz Inacio Lula da Silva, con trajes de presidiarios.

Pero no lograron alcanzar, ni siquiera igualar, las cifras de las anteriores manifestaciones, que de acuerdo a la policía juntaron 2,4 millones el 15 de marzo y a cientos de miles el 12 de abril y el 16 de agosto, cuando millones de personas salieron a las calles para protestar por la corrupción y la crisis económica del país.

«Esperamos menos gente porque en las otras manifestaciones tuvimos dos o tres meses para organizarnos. La de hoy es una señal de que la población está volviendo a las calles, que está muy atenta al proceso de impeachment», dijo Kim Kataguiri, coordinador nacional del Movimiento Brasil Libredurante la marcha en Sao Paulo.

Dilma afronta un juicio político con miras a su destitución que comenzó el pasado martes en la Cámara baja, pero que en estos momentos se encuentra suspendido a la espera de que el próximo miércoles, la Corte Suprema se pronuncie sobre los procedimientos necesarios para llevarlo a cabo.

Los cargos a los que hace frente Rousseff se fundamentan en una serie de maniobras fiscales que el Gobierno llevó a cabo en 2014 y continúo en 2015 con el fin de maquillar sus cuentas. Estas maniobras podrían llegar a ser consideradas «delitos de responsabilidad«, una de las causas que la Constitución brasileña contempla como motivo para la destitución de un mandatario.

Compartí:

Noticias Relacionadas

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.