«Macri y Massa sin chances de un Gobernador en Jujuy 2015»
La carrera presidencial está en marcha, los cuatro espacios que apuntan a conquistar el sillón de Rivadavia están identificados y lanzados; cualquier otra construcción u oferta quedó retrasada de cara al 2015.
Las encuestas múltiples y variadas, poseen el asidero inherente del rigor científico, que permite un análisis objetivo. Acostumbrados a la manipulación permanente de los datos por parte del estado, hoy los aspirantes saben que morenizar encuestas sería un arma letal para sus ambiciones.
Es este sentido, el promedio coloca a Sergio Massa en la línea de los 35 puntos, a Daniel Scioli en los 25, Mauricio Macri en 12, y el Frente UNEN, fenómeno que no puede todavía mensurarse metodicamente, proyecta 15 puntos en estos días.
Los dos espacios más relegados (PRO / FAU) conocen esta realidad, por eso comenzaron a charlar para una posible nueva ampliación del Frente, ya que, de no prosperar las estrategias del marketing, tendrán que experimentar, una vieja razón: “El espanto los unirá”.
En cuanto a la muestra de la provincia de Jujuy, las proyecciones son diferentes. Los presidenciables que registran instalación son; desde luego Daniel Scioli, quien profundizará su proyección cuando Eduardo Fellner se haga cargo del PJ nacional.
El ex moto nauta está cosechando los elogios de casi todos los gobernadores del FpV, a excepción de Juan Manuel Urtubey y Sergio Urribarri que tienen sus propias ambiciones. Pero en Jujuy Scioli es un opción firme, que posee sin embargo un gran escollo; no representa cambio.
Florencio Randazzo, es el otro candidato que posee un grado importante de instalación en Jujuy, el protocolo para recibir el DNI renovado en los hogares, dio grandes resultados en aspectos de conocimiento del candidato.
Esa maniobra le permite a Florencio Randazzo estar en consideración como presidenciable con cierta ventaja sobre Sergi Massa y Mauricio Macri en Jujuy, candidatos que no alcanzaron penetración decisiva en la población norteña, pese a la instalación indiscutida en el centro del país.
Sergio Massa no posee una usina electoral que se identifique con la propuesta de innovación y cambio que Massa asocia a su perfil; los resabios de un peronismo federal cementado y el juego de falsas oposiciones no logran forjar un candidato potable para gobernador.
Por su parte Mauricio Macri, que en Jujuy corre desde muy atrás, especula con un acercamiento al “Chuly” Jorge (UCR), ya que no posee otro candidato que tenga registro en intención de votos para gobernador.
El 7% que alcanzó el PRO en las legislativas del 2013 no le permite ingresar a ninguna discusión con Dago Putzolú, excepto para ser incorporados en listas sábanas de alguna estructura con mayor desarrollo político.
El gran Jaime Durán Barbas sabe que en Jujuy mucho no puede esperar, sin embargo la ausencia de estructuras nacionales llevaron a Macri a establecer contactos telefónicos con dos radios de la provincia días atrás. Salidas destinadas a generar la instalación del niño cincuentón, quien, en ambas radios hizo similares referencias, desconociendo el desconcierto social de la provincia.
Macri, que presume de la transformación de la Ciudad Autónoma de Bs As en su relato, e invita a los interlocutores a visitarla (como Cristina a Salustriana) debería reconocer el aporte inmoral del interior profundo que subsidia históricamente los servicios de la ciudad más rica de la argentina, donde la media de ingreso es de U$S 38.000, con un presupuesto municipal superior a los 50.000 millones de pesos, que desde luego la recaudación fiscal de una ciudad que participa del 14% del PBI nacional le permite asumir sin sobresaltos, junto a la ayuda de nación.
El otro presidenciable, que tiene instalación en Jujuy, es Ernesto Sanz, el cual visita seguido la provincia de la mano de Gerardo Morales. Sanz se presentaría en las internas de la UCR frente a “Cletos” Cobos. Sanz tendría un fuerte respaldo de la estructura conservadora de la UCR de Jujuy.
Después de los mencionados, no quedan otros candidatos instalados en la provincia, pero quienes pretendan cosechar retribuciones deberán realizar viajes y presentaciones adecuadas a las demandas territoriales, las que se presentan con fuertes diferencias, aunque mimetizadas en reclamos parecidos en materia social; tales como inflación, violencia, inseguridad y desempleo.
